Decimos en Mallorca, traducido literalmente, “cada uno vive con el arte que aprende”, pudiendo traducir “arte” por “habilidad” u “oficio”. Nosotros aprendimos a hacer fotos.
Desde la Fundación seguimos, en redes sociales, a gentes que saben mucho más que nosotros, botánicos, entomólogos, astrónomos, matemáticos, ornitólogos, etc. A veces nos cuesta entenderlos, pero, gracias a ellos, nuestras fotos pueden mezclar detalles científicos con la estética y pasar a ser una elegante documentación.
Por ejemplo, últimamente nos ha dado por incorporar insectos a nuestro archivo. Nos paseamos con nuestro cazamariposas y luego “exprimimos” al pobre insecto para justificar su caza. En este caso ha sido un $Bombus terrestris. Aprovecho para recordar que somos fotógrafos, no científicos, y, a pesar de lo que nos esmeramos, avisamos siempre que “nuestras identificaciones” no son seguras, lo hacemos con este símbolo “$” para no engañar a nadie. Si no hay símbolo “$”, significa que alguien preparado ha verificado nuestra identificación.
Este es el resultado de nuestras cámaras de banco y de tomar las fotos con un sensor de formato medio de 50 Mpx. Esta foto del abejorro se tomó a x1,5 sobre el sensor y, por comodidad del lector, hemos anotado el campo abarcado. Y, como la calidad sobra, no hay ningún inconveniente en recortar la punta de la pata y ver una de sus garras, cuatro veces más grande.
La ventaja de trabajar con buen equipo es que permite “hacer milagros”. Véase si no al abejorro mirando a la cámara. Esta vez hemos tomado un x4 y, tan ampliado, el “bicho” estaba bien rebozado en polen y motas de polvo, diríase que un tanto abandonado. En el recorte del ojo, en este caso un x16, se ven perfectamente las motas, que, aparentemente, no le molestan tanto como a los humanos.
Siguiendo la demostración de nuestros equipos, hemos cambiado de cámara y hemos tomado un x10 del ojo. Seguramente al científico le pueda interesar algún otro ángulo. Entonces está claro que, teniendo un archivo de 50 Mpx, no hay inconveniente en hacer un recorte de x40, donde se aprecian perfectamente las motas de polvo y polen que recubren al insecto.
No es la primera vez que lo comentamos, no es lo mismo el multiplicador en macrofotografía que en microscopía. Cuando nosotros decimos que una imagen está ampliada a x10, nos referimos que la imagen sobre el sensor es 10 veces mas larga que el objeto real.
En nuestro caso, siempre, nuestro “POR” se refiere al aumento sobre el sensor de la cámara. Actualmente usamos un sensor de 44 x 33 mm, por lo que, por ejemplo, un x10 significa que nuestro sensor está registrando un campo de 4,4 x 3,3 mm. Por descontado que si hacemos una ampliación en papel o en una pantalla de nuestro x10, habrá que multiplicarla por la ampliación realizada. Dicho de otra manera, x10 es nuestro archivo, cuando lo miramos en una tablet o en un monitor o en la página de un libro vemos una imagen más grande que x10… y si hemos hecho un recorte, más.
En microscopía se sigue otro criterio, los “POR” de los microscopios se refieren al ángulo con que VEMOS la imagen, respecto a mirarla a ojo desnudo. Nada que ver con medidas reales, más bien es la medida de una sensación. Para hacernos una idea aproximada (solo aproximada) los “POR” de los microscopios son como unas 10 veces los del macro, o sea, x10 es, mas o menos, un x100, para la gente que trabaja en microscopía.
Entonces, ya que estábamos, hemos sacado unos detalles de las garras a un x20 (en microscopía, alrededor de x200)
Y, teniendo de partida 8256 x 6192 px, nos podemos permitir el lujazo de hacer recortes como los de la foto de 0,55 x 0,41 mm. donde el pelo rojizo que se ve detrás de las uñas de la garra es de unas 12 a 15 micras de grueso o la uña pequeña mide unos 0,25 mm de largo (unas 250 micras)
Casi desde el principio de nuestra afición, siempre nos ha obsesionado marcar las medidas de lo fotografiado. Desde el punto de vista artístico no tiene ninguna utilidad, pero siempre hemos asumido que nuestra foto puede ser útil al investigador y, en investigación, los detalles son importantes. Como lo es tener la geolocalización del sujeto, o sobre que planta se ha cazado un insecto…
Como dice nuestro lema, “Documentar y Compartir”, compartir nuestras fotos y toda la información de los sujetos que salen en ellas… o hacerlas a medida de la información que se quiera estudiar o difundir.