El futuro de la Fundación

El futuro de la Fundación

Desde el 2019, que abrimos este blog, llevamos más de 65 publicaciones. Podéis verlas en https://fundacionpepbonetcapella.com/blog/
Hemos presentado nuestro trabajo por activa y por pasiva, hemos presentado todo nuestro equipo de cámaras auto construidas, hemos mostrado algunas de nuestras técnicas, dedicamos un artículo a los “gadgets” que usamos en el campo para luchar contra el viento, os hemos tenido al corriente de algunas burocracias para montar la Fundación, hemos hablado de la aventura de montar una sede, hemos presumido de algunos de nuestros logros, en fin, llevamos unos cinco años usando este blog para contaros que somos una Fundación viva, para mostraros que nos cogemos nuestro propio proyecto en serio, con ilusión, para mostraros que estamos disfrutando con lo que hacemos y que nos hace felices compartirlo

Todos estos años, incluso antes de que existiera la Fundación, nos hemos dedicado a la foto de natura, lo mismo grandes panoramas que florecillas que, últimamente, macro y micro fotografía. Estos últimos años, sin abandonar el paisaje, hemos dedicado muchísimo trabajo a las cosas “muy pequeñas”. Granos de arena, caras de minúsculos insectos, hojas de musgos, pólenes y esporas, macrofotografía extrema, incluso microfotografía.
Esta aventura que empecé yo, EL FUNDADOR, la empecé en solitario, hace muchos, muchísimos años. Desde hace unos años que ha dejado de ser una cosa personal, ya somos un equipo, ahora ya “hacemos” fotos, ya “tenemos” ideas, ya “desarrollamos” proyectos… ¡y esos proyectos funcionan!
La Fundación ha reunido a un equipo de gestores que saben lo que hacen, y lo hacen bien. Lo único que aun no hemos resuelto es la continuidad de nuestra producción. La Fundación tiene varias finalidades, la primera que se nos ocurrió, y que ahora ha dejado de ser la primera, era la de gestionar el archivo acumulado en una vida de trabajo apasionado. Muy loable cuando escribíamos los estatutos, pero ahora creemos que lo realmente importante es preservar esos más de cuarenta años de experiencia que nos avalan.

Con toda seguridad, el mayor valor que tiene la Fundación no es su archivo, sino la capacidad técnica y el conocimiento que hemos acumulado para seguir haciendo fotos, cada vez más espectaculares, cada vez más exclusivas. No lo “vendemos” como un alarde, a veces vemos fotos mejores que las nuestras, nos referimos a que son tantos años de resolver problemas de encuadre, de iluminación, de óptica, etc., que ya nos hemos convertido en especialistas… Pero hay un problema, el ser “especialista”, en nuestro caso, SOLO ES UN CONOCIMIENTO, si desaparece el especialista desaparece el conocimiento y, desgraciadamente, las personas tenemos fecha de caducidad.

Por citar un ejemplo, https://fundacionpepbonetcapella.com/tecnicas-de-estudio/, la Lemna giba (conocida como lenteja de agua) es una minúscula planta de unos 5mm que flota en aguas mansas. En el artículo citado se explica como se dio la sensación de foto sub acuática recurriendo a trucos de espejos. Este es uno de los muchos ejemplos que vamos resolviendo día a día.
Otro ejemplo pueden ser las siguientes fotos. Un artilugio de unos pocos milímetros que puede bascular en todos los sentidos. Todos hemos dicho aquello de “levanta la barbilla y mira a la cámara”, ¿cómo le dices eso a una hormiga muerta? O ¿Cómo manejas un esporófito de un milímetro para buscar su mejor ángulo? En las siguientes fotos se muestra el artilugio, con el esporófito pegado con cinta adhesiva de doble cara y el encuadre con el que se tomó la foto, esporas incluidas.

Todas estas explicaciones son para deciros que estamos buscando acólitos que quieran aprender nuestros trucos y técnicas.
Una característica de nuestra Fundación, suponemos que de todas las fundaciones, es la colaboración, “hacer el bien” lo llaman. Nosotros la montamos para compartir lo que, en su momento, creíamos más importante. Ahora hemos cambiado nuestra prioridad, pero no nuestras intenciones, nuestra divisa sigue siendo “DOCUMENTAR Y COMPARTIR”.

Existen muchas disciplinas, botánica, zoología, geología, etc., que se pueden beneficiar de la fotografía, en ocasiones para investigar y siempre para difundir. Hay fotógrafos que ya están en ello, conocemos mucha gente que hace lo que se llama “fotografía de naturaleza”. Incluso algunos se dedican a la macro fotografía y lo hacen estupendamente (el que vayamos viendo fotos extraordinarias lo confirma)
Pero, como se dice, “ni están todos los que son ni son todos los que están”. Para personas, fotógrafos, científicos o comunicadores que les gustaría crear sus propias macro y micro imágenes, nuestra especialidad, la Fundación se ofrece a enseñarles lo que sabemos. Incluso podemos compartir otro de nuestros tesoros, nuestras instalaciones. Nuestros conocimientos son básicos, cierto, pero sin nuestras cámaras y nuestros objetivos aplicar estos conocimientos se hace muy difícil… mantenemos lo de DOCUMENTAR Y COMPARTIR.
Abierto a todo el que esté interesado/a en aprender macro y micro fotografía, porque le interese el tema o porque, muchísimo mejor, quiera colaborar con nuestra Fundación. Nuestra intención es “crear escuela” para que nuestros conocimientos se perpetuen y, como no, la Fundación tenga continuidad, hacer que exista una “cantera” de especialistas. En nuestra página web, https://fundacionpepbonetcapella.com/contacto/, tenéis nuestros datos… y en el resto de la página todo lo que nos define como Fundación y como apasionados, fotos incluídas.

Contactadnos, igual os ayudamos a cumplir alguna de vuestras ilusiones y, si no llegara a suceder, siempre queda el tomar un café y el principio de una amistad.

RESUMEN DE UN AÑO DE TRABAJO

RESUMEN DE UN AÑO DE TRABAJO

 

Este año 2024, a pesar de no haber “engordado” demasiado los archivos de la Fundación, va a ser, para nosotros, uno de los años de mayor rendimiento… ¡Hemos montado nuestra sede física!

​Vayamos por partes, empecemos por el trabajo fotográfico de todo un año. Después de revisar nuestros archivos, vemos que se han incrementado con un total de 289 fotos. Según “San Google (los Dioses nos lo conserven)”, en 2024 ha habido unos 254 días hábiles. Sale a algo más de una foto al día, ¡no es un trabajo agotador! De todas formas, si miramos foto a foto, sí que nos hemos ganado “el pan” (jajaja, somos ONG, Fundación sin ánimo de lucro, nuestro “sueldo” es la satisfacción del trabajo bien hecho). Analicemos un poco qué hemos hecho.

 

 

 

​Tenemos los paisajes, por ejemplo. A pesar de que usamos una cámara de 51Mp, a nosotros no nos basta, de hecho lo que no nos gusta es el encuadre encorsetado de una foto rectangular. Ya hemos mostrado más de una vez paisajes construidos con un mosaico de varias tomas, entre 4 y 20, que, según nuestros gustos, mejora la sensación de panorama, a la vez que nos deja un encuadre algo anárquico, por ejemplo este rincón del hayedo de Coll Formic, en Montseny. Esta foto, como quien no quiere la cosa, es un montaje de 15 tomas de 51Mp. Descontando superposiciones, el original “pesa” 29095×19160 píxeles.

O estos plátanos de sombra, en la carretera de Puigpunyent en Mallorca, que no recuerdo si son 15 o 18 tomas, pero que el original “pesa” 39224×14428 píxeles.

 

 

​Hablamos de fotos que quedan preciosas llenando paredes enteras, fotos que permiten reencuadres “a lo largo y a lo ancho” sin que se pierda la calidad. Dicho de otra manera, “solo” hemos archivado 56 paisajes en todo el año, pero si empezamos a multiplicar cada una de ellas por los mosaicos que las componen, solo en paisajes ya nos vamos a bastantes cientos de fotos, muchos miles de megabytes, desplazarse, hacer las tomas, los revelados RAW, los montajes del mosaico, casar luces y retoques… Solo con los paisajes ya se justifican bastantes horas de trabajo… ¡al menos el almuerzo!, jajaja

Otro tema al que hemos empezado a dedicar esfuerzos es el mundo de la entomología. Siempre habíamos sido de botánica, nos especializábamos en frutos y semillas, hasta haber publicado un libro en el año 2021, “DIÁSPORAS. Frutos y semillas de la flora Balear. DISPERSIÓN”, pero nos gusta variar. Nuestro espíritu anárquico nos permite ir probando nuevos retos, y los “bichitos” tienen un atractivo especial.

           

 

​Tampoco nos hemos “matado” con los bichos, un total de 141 fotos archivadas. Pero volvamos a mirar, la mosquita tan nítida y bien enfocada que parece un dibujo, con tanta profundidad de campo, es el resultado de apilarlo mejor de 70 tomas y el microscópico halterio, al que se le ve la textura de unas 0,5 micras, necesitó 665 tomas. Son horas tomando fotos, horas convirtiendo RAW’s  y horas apilando y retocando. Digamos que empezamos a ser rentables, estas 141 fotos pueden representar cerca de 10.000 disparos.

​Siguiendo estas pautas, el año 2024 ha aportado, según archivos, las citadas 289 fotos nuevas a nuestra GALERIA. Estamos orgullosos, pero no solo de eso (aunque sí presumimos)

Nuestro mayor logro, en 2024, ha sido poder montar una sede abierta a visitas (antes trabajábamos “en un trastero”) Durante años lo que hoy es Fundación fue un pequeño laboratorio/estudio personal. Por descontado que todo el mundo era bienvenido, pero todo residía en una habitación con 6m2 libres, abarrotada de estanterías con dos sillas y una mesa, ¡comodidad cero! Cuando hablo de este pasado me crezco, porque en esta poca comodidad se ha gestado la mayoría de nuestro archivo y todo lo que se hizo en aquel cuartito son los cimientos de nuestra actual Fundación, ¡da para presumir!

​No me haré pesado repitiendo cosas que ya hemos publicado, un primer artículo cuando empezamos el montaje, https://fundacionpepbonetcapella.com/sedesocial/, y luego, cuando estuvo listo, este otro artículo, ​https://fundacionpepbonetcapella.com/sede-habemus/.

A pesar de todo, no me resisto a repetir una foto del actual despacho de dirección (que se ve en los artículos citados), más que nada para que se aprecie para que sirve un paisaje montado de un mosaico, cuando se quieren decorar 4 metros de pared con un vinilo, impreso a 300dpi.

 

 

​Y, ¿para qué queríamos una sede? Nuestros 6m2 han crecido a unos 70m2. La mesa y las dos sillas poco hospitalarias se han convertido en 5 mesas de trabajo y asiento para 15 personas. Las cámaras que vibraban y que a veces dejaban fotos “movidas”, están perfectamente asentadas y hacen las mismas fotos que antes, pero con muchísima más comodidad, ya no tenemos alargadores por los suelos para enchufar las luces. Incluso, como excelente aporte de nuestra Secretaria y decoradora de la sede, hay cafetera porque, textual, “una fundación sin cafetera, ni es fundación ni es nada”. 

​Todo este esfuerzo proviene de que nuestra intención con la Fundación nunca ha sido la de crear un almacén de imágenes, nuestra divisa es “DOCUMENTAR Y COMPARTIR”, en presente y activamente. Cierto que compartimos nuestra GALERÍA, pero este archivo debe ser un “archivo vivo”, debe crecer, en lo que nos apetezca a nosotros y en lo que podamos colaborar con los demás.Parte de las cosas que hacemos han sido en proyectos ajenos, como documentar una colección de arenas o hacer un seguimiento del crecimiento de una viña o, como fue en su día un proyecto nuestro, recoger varios miles de fotos de frutos y semillas de plantas de las Baleares.

​Por eso necesitábamos más espacio, necesitábamos “caber”. Si queremos una Fundación viva, debe haber gente que continue el legado cultural que representa. No solo un archivo físico, hemos de formar acólitos, enseñando todas nuestras técnicas. La Fundación no es “un secreto bien guardado”, antes al contrario, después de toda una vida de educador, la Fundación está para repartir, para difundir conocimientos, para compartir una vida de experiencia fotográfica que ha terminado especializada en macro y micro fotografía.

​Para nosotros era importante poder impartir formaciones, no montar un instituto o una academia, esto existe y parece que funciona bien. Nuestra intención es, a estas personas, probablemente ya fotógrafos, que tengan el gusanillo de especializarse, enseñarles todo lo que sabemos. Incluso si alguien va más allá, se obsesiona con la macro y la micro y, por lo que sea, no tiene instalaciones adecuadas, poderle integrar en nuestra organización y, si ha lugar, admitirle como continuador del legado cultural de la Fundación. Una Fundación viva exige que, aunque las personas somos finitas, no lo sea la finalidad que nos sostiene. Una Fundación viva exige continuadores.

​Por eso, amigo lector, amiga lectora, si ves algo en nuestra Fundación que te interesa, sean nuestros conocimientos, nuestros archivos o nuestras instalaciones, bien porque eres investigador y nuestras fotos mejorarían tus trabajos, bien porque estás interesado en nuestras técnicas o bien porque eres comunicador y, ya se sabe, “una imagen vale más que mil palabras”, contáctanos.Quizá, en nuestro archivo, tenemos esta foto que necesitas o, incluso mejor, tenemos la capacidad técnica e intelectual de “DOCUMENTAR” a medida, de hacer estas fotos que aun no se le han ocurrido a nadie.

Incluso si comercias con imágenes, nosotros no comerciamos, no somos un banco de imagen, somos una Fundación sin ánimo de lucro, pero necesitamos cubrir gastos de funcionamiento e inversiones en instrumental. Seguro que podemos establecer colaboraciones entre Empresa y Fundación, ventajosas por ambas partes. En nuestra web, “fundacionpepbonetcapella.com”, está toda nuestra información, quienes somos, qué hacemos, dónde estamos y como contactarnos. Para nosotros será un placer.

HEMOS VUELTO DE UNA CAMPAÑA FALLIDA

HEMOS VUELTO DE UNA CAMPAÑA FALLIDA

Fuimos al Montseny, en plan documentación de otoño. Pero nada ha salido bien. En lo estrictamente privado, empezamos con el fallecimiento de un familiar que afectó a uno de los participantes. ¡Mal comienzo!

Eso fue el lunes, 28. El martes empezó el drama de la DANA y, aunque eso fuera en Valencia y nosotros estuviéramos en Cataluña, hemos tenido más lluvias que claros. Piénsese que íbamos a hacer fotos, cámaras, objetivos, etc., nada que se deba mojar.

Además, en Cataluña se están unificando los campings y ya solo abren fines de semana. Nosotros necesitábamos estar toda la semana y, después de intentarlo en cinco campings diferentes, en uno, al sur del macizo, encontramos alojamiento… ¡menos mal!… pero resulta que el paisaje otoñal está al norte.

Entre lluvias y desplazamientos, la campaña ha sido un desastre. Hemos hecho un total de 27 fotos de archivo en una semana.

Cierto que algunas han quedado bien, pero ante la cantidad de problemas que han aparecido, más bien han sido fotos de fortuna, fotos para salir del paso entre chubasco y chubasco.

La parte sur del macizo del Montseny está poblada, básicamente, de encinas y  robles. Predomina el bosque mediterráneo, mientras que las fagedas, más espectaculares en otoño, están más al norte. Fotográficamente, el sur es soso.

Por ejemplo, esta fageda yendo hacia Santa Fe, pero con nieblas y lluvia… Está claro que hacer reportaje estaba difícil.

Yendo hacia el Brull, en Coll Formic, hay un pequeño hayedo que, en una tarde sin lluvia, nos permitió algunas fotos.

Lo dicho, esta campaña solo ha rendido “27 fotos de archivo”… Somos de natural optimista, pero las cosas “son como son y vienen como vienen”.

Tampoco tenemos derecho a quejarnos, nuestras campañas anteriores han sido buenas y las que vengan también lo seran.

En fin, seguimos a vuestra disposición en nuestra sede, trabajando en lo que nos gusta. Si os apetece, estáis invitados a café para hablar de foto de natura… incluso, igual podemos ayudaros en vuestros proyectos. Al fin y al cabo, la Fundación está para compartir.

SALIMOS DE CAMPAÑA, UNA SEMANA EN EL MONTSENY

SALIMOS DE CAMPAÑA, UNA SEMANA EN EL MONTSENY

Esta foto es del archivo de la Fundación, estamos especializados en macro, pero cuando fotografías una flor milimétrica en un bosque así de precioso, sería del género tonto no llevarte una foto del entorno… Y, como la foto es nuestra, la hemos usado para decorar el despacho de dirección de la Fundación, 3,6×1,2 metros de foto y así nos ha quedado…

En fin, toda la semana que viene, concretamente del 28 al 6 del siguiente, haremos una de nuestras salidas fotográficas. No son estrictamente vacaciones, vamos a trabajar, pero ¡hay vacaciones que no resultan tan divertidas! Eso si, la Fundación, nuestra nueva sede, quedará desatendida unos días.

Hace unos años que ensayamos un sistema que nos está dando un gran rendimiento, nos movemos en furgoneta, de camping en camping. Nos guía nuestra gran colaboradora, Pilar Busquets, magnífica compañera de aventuras. Acampamos y sacamos “los vehículos autónomos”, y eso nos permite movernos distancias considerables por caminos de montaña, explorando grandes espacios, con la cámara a cuestas.

Ahora estamos seleccionando el equipo, llevaremos gran angular, un tele corto para detalles no accesibles y nuestra BONET II, nuestra cámara de campo que permite desde X0,25 hasta X2. Una gama macro que, para hacer “in situ”, es más que correcta y, además, cómoda.

Por descontado que ¡siempre!, una colección de filtros degradados para equilibrar los paisajes. Las diferencias de luz entre cielo y tierra, en un bosque, pueden llegar a 5 y 6 diafragmas y estropear el mejor encuadre. Y ¡siempre! trípode. ¡Somos antiguos! Intentamos tomar nuestras fotos como si no existiera el “potocho”, equilibramos luces y colores en la composición, en la toma. Luego, con una foto totalmente correcta, si hacemos algún mínimo retoque no estamos “salvando” nada, más bien “mejoramos”… El problema (y el trabajazo) de ser “unos clásicos”.

Otra cosa, en una semana podemos movernos más de 200km, recorreremos caminos vecinales, carreteras locales, etc. y, para ello usamos dos tipos de mochila, ambas enganchables a los transportines del trike, tal cual alforjas. La negra de la foto, una mochila Lowepro, específica de fotógrafo y muy buena, llevamos años con ella y como nueva… pero no es impermeable. La roja no es específica, es una alforja normal de Ortlieb, pero es totalmente impermeable y, además, tiene el detallazo de ser reversible: por una cara correas ajustables, tipo mochila, y por la otra los típicos enganches de portabultos de bici. En este viaje llevaré la impermeable, que estamos en otoño y mi equipo fotográfico vale un riñón.

Además, esta vez vamos a rizar el rizo, vamos dos miembros de la Fundación, Tomeu se dedica a técnicas antiguas, ambrotipos, colodión, bromoil, etc. En este viaje, Tomeu solo se quiere traer una cámara estenopeica (un cajón de madera con un agujero de aguja) y hacer fotos de natura “sin óptica”. Es más, “aun” usa película, pero es que además, hace revelados raros. Revela con café instantáneo, hace revelados “desatendidos” de 2 y de 3 horas, altera todas las respuestas de la película, consiguiendo que la película se adapte a sus deseos… ¡y “hace” unos fotones de lujo!

Porque supongo que sabéis la diferencia entre “tirar fotos”, tener que “tirar” media docena por ver si alguna sale bien o si se “tiran” todas a la papelera. Luego está “tomar fotos”, yo mayormente no hago otra cosa, buscar el encuadre que interesa y “tomar” la foto… Y está Tomeu, juega con el encuadre, dosifica la luz, rellena lo que le parece, revela la película alterando sus características y, además, retoca el resultado… ¡foto de fabricación artesanal!

 

¡Ah! Y Tomeu quiere estrenar un planteamiento nuevo, como que sus fotos estenopeicas son de larga exposición, segundos, hasta minutos, ha pensado “hacer las fotos con sonido”, acompañar a la imagen con los sonidos del bosque mientras dura la exposición.

Lo dicho, nos vamos 9 días de campaña al Montseny, a documentar el otoño catalán, Pilar, Tomeu y yo. No tengo ni idea de qué saldrá, pero, como veis, pueden salir cosas guapas. Con gente como nosotros siempre hay sorpresas.

Si esto te ha parecido interesante, compártelo. Y si te parece que nuestro trabajo puede ser útil en lo tuyo, contacta con nosotros, https://fundacionpepbonetcapella.com/

Somos, precisamente, una Fundación dedicada a la colaboración gráfica, sea con nuestro archivo, que puedes ojear en la web, sea con nuestras nuevas instalaciones, donde podemos crear fotos de objetos entre 80 y 1 milímetro al tamaño de llenar paredes.

PRECISIONES SOBRE EL LIBRO “DIÁSPORAS, FRUTOS Y SEMILLAS DE LA FLORA BALEAR, DISPERSIÓN”

PRECISIONES SOBRE EL LIBRO “DIÁSPORAS, FRUTOS Y SEMILLAS DE LA FLORA BALEAR, DISPERSIÓN”

En 2022, J. L. Gradaille y un servidor, publicamos un libro sobre la dispersión de las plantas, en particular las de las Baleares. Fue una bonita forma de conjugar media vida de fotografías de frutos y semillas con una idea que le rondaba a J. L. Gradaille de dar difusión a los distintos tipos de dispersión que usan las plantas. Nos pareció que “DIÁSPORAS” definía perfectamente esa vida secreta de las plantas, esas cosas que hacen unos seres, teóricamente inmóviles, “paseándose” a lo largo y ancho de este mundo.

Es del parecer general que las plantas son “seres inferiores”, al menos inferiores a los animales, algo menos sosas que una piedra. Se puede jugar con una mascota, pero una planta es “sosa”, no da lametones… como mucho nos regala algunos aromas y algunos colores… ¡Eso cree mucha gente!

¡Nada más lejos de la realidad! Cierto que las plantas no poseen ni sistema nervioso ni músculos… ni cerebro conocido ¡En la Universidad de Florencia existe un “Laboratorio de neurobiología vegetal”! ¿Hemos de pensar que los florentinos han perdido la cabeza?.

Recomendamos leer el siguiente artículo de nuestro blog,  http://xhl.dd1.mytemp.website/comunion-con-la-naturaleza/, los olivos tienen la capacidad de detectar tormentas de agua, frio y nieve y son capaces de mover sus hojas a voluntad. Y, como cito en el artículo, leed a Francis Hallé o a Stefano Mancuso (El “neurobiólogo vegetal”) para dejar de menospreciar la “inteligencia” de las plantas.

Esta introducción viene a cuento de las técnicas de dispersión que tienen las plantas. Unas ponen flotadores a la semillas, para que se alejen nadando. Otras las dotan de vilanos para que floten en el aire y se las lleve el viento. Hay plantas de hacen crecer ganchos en las semillas para que se enganchen en el pelo de los animales que las rozan. Las hay que recubren la semilla de pulpa azucarada para que las coman y las defequen lejos. Etc. etc. Está claro que unos seres clavados al suelo por unas raíces han encontrado la manera de “urbanizar” nuevas tierras.

Hay dos técnicas de dispersión, una dispersar las semillas por “disparo o explosión del fruto” y otra dotar a la semilla de una bola de comida llamada eleosoma, compuesta de grasa, proteina y azúcares que gustan de sobremanera a las hormigas, que han puesto de manifiesto una imprecisión en “DIÁSPORAS”.

Las plantas pueden recurrir a UN tipo de dispersión o a VARIOS. A veces procuran sumar varios beneficios, por ejemplo conseguir expandir su territorio y, además, conseguir que alguien entierre las semillas para mejor germinar. Un truco muy común es usar a las hormigas, la llamada mirmecocoria. Se ofrece comida a las hormigas, típicamente en forma de eleosoma, y estas llevan las semillas a sus galerías, bajo tierra. Pero también es corriente que algunas plantas hagan explotar sus frutos para que las semillas salgan disparadas, lejos de la planta madre.

La autocoria en forma de disparo, pusimos en nuestro libro, la usan por ejemplo Euforbiáceas o Zigofiláceas,

ello incluye al Ricinus communis entre otros. En general, estas plantas, ellas mismas, son dispersoras de su material genético pero es común que estas semillas vayan dotadas de eleosomas que buscarán con fruición las hormigas. Entonces cómo debemos definirlas, ¿autocoria o zoocoria? En nuestro libro pusimos las Euforbias como autocoria y el Ricino como zoocoria. Ambas definiciones son ciertas y ambos taxones deberían haber coincidido en la misma dispersión, una u otra o las dos a la vez.

Este “examen de conciencia” se lo debemos a www.tonitofa.com, ¡gracias @tonitofa! Nos comentó, a un artículo sobre el Ricinus communis, que había un ricino cerca de su casa que le “bombardeaba” con semillas, incluso que oía los “disparos”… Rápidamente lo hemos investigado. El artículo es http://xhl.dd1.mytemp.website/ricinus-communis-entre-la-medicina-y-el-terror/

Gracias a este comentario hemos descubierto una imprecisión en el texto de nuestro libro que, en futuras reediciones, habrá que matizar. Solo somos fotógrafos, no biólogos, pero intentamos ser muy precisos con lo que comentamos.

Ya véis nuestras posibilidades, queríamos explicar esta imprecisión respecto al Ricinus communis y, sin ningún problema, hemos recogido unos frutos de esta planta y nos hemos montado unas fotos y un video para hacer más amable el artículo.

También es cierto, como publicamos hace unos días en el artículo http://xhl.dd1.mytemp.website/nada-es-lo-que-parece/, que esta simple “rectificación” ha representado una salida al campo a recoger unas ramas con fruto de Ricinus communis, unas horas de grabación de video hasta tener la “explosión”, 15 tomas fotográficas para tener una semilla bien enfocada con profundidad de campo y unas horas de edición y montaje. Esta es nuestra idea de hacer las cosas bien y la practicamos desde fundacionpepbonetcapella.com para “todos los públicos”. Siempre a vuestra disposición.